jueves, 27 de marzo de 2014

Descubriendo las aldabas (I) / Discovering knockers (I)

Hoy queremos mostraros una de las cosas que más fascinación nos produce de Valencia, las aldabas o llamadores antiguos. Son pequeñas joyas que nos regala la ciudad, que a menudo pasan desapercibidas y que cada vez encontramos con menor frecuencia en los grandes portalones de entrada de las fincas señoriales y de los palacetes, pero que por suerte aún podemos descubrir y admirar.

Las hay de todos los tamaños y de todos los estilos. Algunas están decoradas con motivos animales y vegetales, otras son pequeñas manos de persona o simples anillas, pero todas guardan una belleza especial.

Esperamos poder ir ampliando, poco a poco, este apartado que tanto nos gusta con nuevas fotografías y os animamos a que no perdáis de vista las viejas puertas ¡porque esconden pequeños tesoros!

Today we want to show you one of the most fascinating things you can find around the city: the old knockers adorning doors as old as them. They're little jewels, not easy to detect and it grows harder everyday to surprise them guarding the large gates of manor houses and palaces. But if you have a keen eye, you might still be lucky to notice and admire them. 

They come in lots of different sizes and shapes. Some of them recall animals or plants, other represent little human hands or plain rings, but all of them preserve a special beauty. 

Hopefully we'll find new graphic material to enlarge little by little this section we love so much. In the meanwhile, keep your eyes wide open and never miss a glimpse to the old doors, because they hold small treasures! 









 






viernes, 14 de marzo de 2014

Fallas experimentales, críticas y combativas

Hoy vamos a hablaros de fallas. Pero de las fallas que no son como las demás. Las que siguen manteniendo el espíritu crítico. Las que apuestan por una estética diferente. Las antisistema. Las populares y participativas. Esas que son la excepción, pero que deberían ser la regla.

Aunque, de cara a la galería, estén eclipsadas por las grandes fallas de la sección especial, sigue habiendo comisiones que apuestan por recuperar la esencia de la fiesta, tal y como fue concebida en los inicios. Son pocas, pero hacen mucho ruido. Son fallas que han vuelto a construir sus monumentos a partir de madera, papel y cartón, según la tradición artesanal. Que cuentan en sus filas con gente joven que quiere modernizar la fiesta. Que se han vuelto a abrir a sus barrios para integrar a los vecinos en la fiesta.


jueves, 6 de marzo de 2014

Tras el auténtico buñuelo / After the real fritter

Ya están aquí las Fallas. Los que vivís en Valencia lo habréis notado porque llevan ya varios días instalando alumbrados, más o menos gigantescos delante de vuestros balcones, y hoy, además, al intentar entrar con el coche en vuestra calle, os habréis dado de bruces con un carpa. Sí. Se respira en el ambiente. Eso que notáis es el humo de los cientos, qué cientos, ¡miles!, de paradas ambulantes que dicen vender buñuelos de calabaza, ese dulce típico de la época de Fallas que tanto nos gusta.

Pero no os dejéis engañar. Lo que se vende en esas paradas que surgieron como setas después de la lluvia en una sola noche, no son buñuelos ni por asomo. Muchos, de hecho, no llevan ni calabaza. Y qué contaros del aceite donde se fríen. El penetrante olor a quemado que inunda las esquinas de la ciudad y el humo negro que emana de esas freidoras no augura nada bueno.

Nosotras, por vuestra salud y para que, ya que os vais a saltar la dieta sin necesidad de pértiga ni colchón, le deis disfrute al paladar, os recomendamos algunos de los mejores sitios de la ciudad donde podréis degustar exquisitos y auténticos buñuelos de calabaza. Para llevar o para tomar allí mismo con un buen chocolate a la taza.

Fallas are already here. If you live in Valencia, you might have noticed because more or less gigantic streetlights have been installed in front of your balcony and besides, when trying to access your street by car, you have stumbled upon a big white tent. Yes. You can breathe it in the air. That thing you're smelling, that's the smoke coming from the hundreds -did we say hundreds? We meant thousands!- of street sellers who allegedly distribute pumpkin fritters to innocent passers-by. Pumpkin fritters (in Valencian, bunyols de carabassa) are some of the Fallas basic foodstuff and we like them most. 

But don't be fooled. Whatever is sold in these street stalls which sprang forth as mushrooms after the rain in barely one night, it can't be described as a pumpkin fritter. Not in the slightest. In fact, many of them do not have pumpkin as their main ingredient. And what can be said about the oil where they're fried. The penetrating burnt smell at every corner of the city and the black smoke emanating from those huge deep-fryers are no good omen. 

Because we have regard for your health and because we know you're going to pole vault diet no matter what, here you will find the top traditional establishments in the city to taste delicious, genuine pumpkin fritters. To take away or to take in dipped in a cup of nice hot chocolate.